¿Y si la culpa fuera de Swanson?
Hoy he participado por última vez este año en la tertulia de La Bolsa y la Vida en Capital Radio, esta vez con Miguel Sanmartín. Uno de los temas de los que hemos hablado es de los precios del petróleo, de lo bajos que son, y de las pocas expectativas que hay de que suban a corto plazo. Por supuesto, a largo, todo el mundo tiene una opinión. Aquí podéis escuchar la tertulia:
La mía es que más allá de que suba o baje, en pocos años, el precio del petróleo dejará de ser ese indicador clave para la economía mundial, y empezará a ser sólo importante para unos pocos. Algo así como le pasó al carbón. Pero hasta que pase eso, sinceramente dudo que volvamos a ver precios como los que teníamos no hace poco.
Los expertos en esto hablan de la situación de la demanda y de la economía mundial, de intereses geoestratégicos y del fracking como principales razones de este precio tan bajo que tenemos ahora. Y sin duda tienen razón.
Pero yo quiero creer que hay un mar de fondo en la situación del precio del petróleo, y ese mar de fondo se llama la Ley de Swanson. Esta ley, que se llama así como paralelismo con la famosa Ley de Moore, es como aquella, una observación y no una ley física.
La Ley de Swanson dice que cada vez que se duplica el volumen de paneles solares fabricados a nivel mundial, el precio del mismo baja un 20%. De hecho, los precios han pasado de más de 76$ la célula solar, a 0.36$ desde 1977 al 2014.
El crecimiento mundial de la producción ha sido menor los últimos años debido a las turbulencias que han creado los subsidios (y su desaparición) en muchos países. Aún así, es conservador pensar que en menos de 10 años el precio caerá a la mitad del actual siguiendo la Ley de Swanson.
De hecho, ya en la actualidad la fotovoltaica es competitiva en muchos mercados incluso sin subvención. Este reciente informe de Lazard, muestra una situación impensable hace muy pocos años, con la fotovoltaica dando los mínimos precios una vez quitados los subsidios y sin quitar costes medioambientales.
Pero es que el efecto red del que se benefician las energías convencionales, van a empezar a jugar a favor de las renovables en breve. En concreto, el descenso en el precio de las baterías, que será el verdadero impulsor del cambio a los coches eléctricos, cambiará el terreno de juego en el mercado eléctrico.
Porque no nos olvidemos, en realidad el petróleo no tiene tanto peso en la generación eléctrica, lo tiene en el transporte. Pero es de esperar que las mejoras en la generación junto con el efecto red del que hablábamos haga que el cambio al coche eléctrico se acelere, y mucho, y cuando eso ocurra, será game over para los productores de petróleo ya que el mercado será mucho más pequeño.
Así que si eres un productor de petróleo con un montón de reservas y ves la Ley de Swanson que te pasa por encima, ¿qué harías? Seguramente, vender todo lo que puedas al precio que puedas antes de que te lo tengas que comer con patatas… ¿Les suena el escenario?
@resbla