Estamos cerca de la Era de la Fusión Nuclear… sí, en serio
De la Fusión Nuclear se lleva diciendo desde hace más de 50 años que estamos a 20 años de que sea una realidad. Durante las últimas semanas, se han producido noticias muy relevantes que invitan a pensar que ahora sí que es verdad, incluso que podríamos estar más cerca.
De todo esto hablamos en este technobits de Capital Radio con Luis Vicente Muñoz:
En las últimas semanas se han producido cuatro noticias muy importantes en el campo de la fusión nuclear que hacen pensar que su explotación comercial podría ser una realidad la década que viene.
La primera de estas noticias ha ocurrido en un proyecto que necesita de muchas buenas noticias. El ITER anunció que la primera parte del que será el mayor imán del mundo había llegado ya a sus instalaciones. Se dice que tan potente que sería capaz de levantar un portaaviones 6 metros del suelo.
Los más viejos del lugar recordamos que España estuvo a punto de ser el lugar elegido para la construcción de este pantagruélico proyecto internacional. Un proyecto que lleva 10 años de retraso y maneja actualmente un presupuesto 4 veces el inicialmente proyectado. Aún así, se espera que en el 2035 el ITER empiece a funcionar, aunque es difícil prever cuándo los experimentos darán resultados.
Otra noticia muy interesante viene del Wendelstein 7-X alemán. Un dispositivo del tipo stellator que se utiliza para almacenar el plasma necesario para generar fusión nuclear de forma sostenida. Los stellator fueron de los primeros diseños que se utilizaron para ello. Sin embargo, su diseño los hace muy complejos de diseñar, construir y operar, por eso se fueron dejando a un lado a favor de otros diseños, sobre todo el Tokamak (que utiliza el ITER).
Sin embargo, los avances en computación y materiales han dado una segunda vida al stellator. Recientemente los investigadores del Wendelstein-7X anunciaron que gracias al último rediseño del reactor gracias a potentes supercomputadores han roto los límites de temperatura que anteriores diseños tenían y consideran que pueden alcanzar temperaturas el doble que las del sol.
Hace también unas semanas, se produjo otro avance significativo esta vez en el mundo del confinamiento inercial. A diferencia del confinamiento magnético que utiliza tanto tokamaks como stellators, en este caso se utilizan láseres para generar y contener la fusión. Para ello, se necesita una energía enorme para conseguir la ignición. Pues bien, utilizando un láser cuyo generador ocupa tres campos de fútbol y que proyecta toda la energía en un punto con el diámetro de un pelo humano, los investigadores del NIF han conseguido un nuevo récord consiguiendo el 70% de la energía que se estima que se necesita para esa ignición. Nada más y nada menos que 25 veces el anterior récord.
Pero si todas estas noticias no dan alas al optimismo sobre la posibilidad de que la fusión nuclear sea viable como fuente de energía, hace pocos días CFS (una startup financiada por Bill Gates) y el MIT anunciaban que han conseguido un imán construido con superconductores a alta temperatura que es capaz de generar un campo magnético utilizando tan poca energía que sus estimaciones dicen que será capaz de conseguir generar energía positiva neta de una fusión nuclear cuando se instale el imán en el SPARC, el reactor de fusión nuclear que está construyendo el MIT y que se espera que esté en funcionamiento en el 2025.
SPARC está también basado en tokamak, pero es de un tamaño mucho más pequeño que el ITER. Si efectivamente una vez construido fuera capaz de generar más energía de la que consume para generar la fusión, en un formato «pequeño» comparado al ITER, sería un avance que abriría las puertas a una energía limpia, prácticamente ilimitada y muy barata.
Este blog no trata de ingeniería nuclear, nos interesa más el mundo de los negocios y la innovación. Si se soluciona la parte técnica de este problema, uno no puede dejar de preguntarse qué tipo de modelos de negocio se montarían alrededor de ella, sin duda muy diferentes de los que hoy tienen las eléctricas que son una mezcla de suscripción y pago por uso.
Un modelo obvio al que se podrían parecer esas futuras eléctricas comercializando energía proveniente de la fusión nuclear sería el actual de las empresas de telecomunicaciones. Empresas que tienen que hacer importantes inversiones iniciales en infraestructura, pero que luego tienen unos costes marginales muy pequeños. Un modelo de suscripción puro con diferentes tarifas de tarifa plana por potencia contratada sería bastante lógico.
Pero hagamos un poco de negocio-ficción. Qué pasaría si quién construyera los reactores no fuera una empresa del sector de la energía y fuera por ejemplo… una tecnológica. No sería del todo descabellado que una de las grandes, con grandes necesidades de energía decidiera saltarse a las eléctricas. De hecho, ya lo están haciendo.
¿Y qué haría una gran empresa tecnológica con energía gratuita e ilimitada? Probablemente darla gratis a cambio de datos. O incluso ofrecer dispositivos que sólo funcionen con la electricidad de una determinada empresa y con un marketplace en el que se ofrezcan todo tipo de soluciones a cambio de un porcentaje que por supuesto sólo funcionen con esa electricidad.
En un post en el que decíamos que esta década será maravillosa por la cantidad de avances tecnológicos que veremos frente a las últimas décadas en las que los avances han sido un poco más triviales, incluíamos la fusión cómo algo poco probable en esta década. Y probablemente lo sea. Pero lo que está claro viendo todos estos avances es que ya decir que estamos a 20 años de que la fusión nuclear sea una realidad cómo fuente de energía es pecar de pesimismo.
@resbla